DE MAÑANA. La parte positiva de todo esto

La vida da tantas vueltas que si no los vives como una oportunidad de pescar en río revuelto, estás bien fastidiado (léase lo que se tiene que leer).

Buscar la parte positiva, que siempre la hay, es una actitud innata en mi, debe ser  un instinto de supervivencia y asidero fértil que me ha traído de vuelta siempre, aunque las ganas de ir, desaparecer, dejarlo todo... en fin, de huir, son siempre una tentación abierta 24 horas, 365 días al año.

Ahora se habla mucho de recursos y herramientas, ¿verdad? Hay palabras a las que estoy empezando a coger manía y a no creérmelas: me pasa lo mismo con Robert de Niro y Al Pacino... que además de confundírmelos, me empachan y no les veo más que un registro.

A lo que voy, uso herramientas y recursos para curarme de los mareos y vértigos que la vida me produce. A saber; familia, naturaleza, color, sentido del humor, ejercicio y mucha constancia.

No siempre estoy como unas castañuelas, ¡qué va! mi estado de animo es más bien delicado y caprichoso, pero tengo un remedio infalible: me han enseñado- y he aprendido-  a reconocerlo, a convivir con él y a darle lo que necesita, ¡palos!

Compañía de la buena, mucho ejercicio, arroparse con el paisaje y pegarse cada día a bofetada límpia con lo que no traiga color, calor y sirva para construir y mejorar.

¡Muy buenos días, caminantes!