LA PARED DE LOS POETAS
quien duerme conmigo tiene las manos tibias
la boca dulce y los ojos vivos
quien conmigo duerme me habla despacio
me susurra calma y amparo y el mundo deja de herir
y quienes en el mundo viven se desvanecen
tras su aliento húmedo al entrar en mis oídos
en la tregua del íntimo desorden
sólo ya saliva y sudor
el esfuerzo en mi boca de una palabra quizá dos
para dormir al fin atrapada en su sosiego
quien duerme conmigo lee en mi desvelo
y con su empeño sostiene mi pobre descanso
Poema incluído en "Íntimo Desorden" de R. Pato Cid
Puedes escucharlo aquí:
Comentarios
Mi descanso era de encuentro, no de desencuentro... aunque al final terminó en encontronazo. Pero el rato que duro fue rico, tierno y necesario. Gracias y cúrate, hazlo por ti.
Publicar un comentario